Este espectáculo, con música en vivo, es una mezcla de ritmos electrónicos con instrumentos musicales étnicos y convencionales. La sonoridad del Ronrroco de Bolivia junto a samplers, batería y bajo electro acústico armonizan leitmotiv, instrumentos que cruza de forma transversal la narración. La palabra es más bien expresiva y propone la relación con el público, con preguntas y canciones; si bien es excusa, ya que se prioriza por la comunicación a través de las imágenes y emocionar a través de la música.